viernes, 8 de agosto de 2008

Agua


¿Sabes?

Hay muchísima gente en África que no conoce este aparato.
Un simple grifo.
Parece increíble ¿verdad?

¡¡¡Un grifo!!!

¿Has visto alguna vez la cara de un niño africano viendo por primera vez salir agua de un grifo?

No es justo ¿verdad?

No, no lo es. Pero millones de personas, caminan decenas de kilómetros a diario para conseguir algo de este líquido preciado llamado agua. Otros, la beben demasiado contaminada.

La próxima que abras un grifo, piensa en esto que leíste.

4 comentarios:

Stultifer dijo...

Ni un grifo, ni un BIC, ni un papel donde aprender a escribir su nombre. No. No es justo. ¿Alguien dijo que la vida era justa?

Anónimo dijo...

Coño. Dejo de visitarte un tiempo y ahora ya tienes otro blog y además interesante. Me tienes que decir cómo lo haces porque a mí me falta el tiempo. Saludos desde Madrid.

Markesa Merteuil dijo...

Precisamente de esa cara es de la que me hablan siempre quienes acogen a niños saharauis durante el verano. Niños que nunca han estado aquí y que ven esas cosas por primera vez. No sé hasta qué punto es buena la acogida. El regreso, sobre todo para las niñas, tiene que ser terrible. No olvidemos que aquí les hablamos de una libertad femenina que en su país nunca tendrán. Tal vez cuando ya puedan decidir por sí mismos y obtener becas y... pero no de niños. Creo que generamos infelicidad de un modo excesivamente gratuito. O tal vez no.

En su día también estuve tentada a esa acogida temporal, pero me dieron miedo las posibles consecuencias.

Angel dijo...

Bonito blog, Mario! Me ha encantado su contenido y sus fotos. Y llevas muchísima razón. Aquí -en el consumismo duro y puro- ya no nos planteamos la importancia de detalles semejantes: un grifo, una silla, un sofá, un colchón, un baño... todos esos detalles que nos hacen la vida agradable y de los que carecen un montón de gente en este mundo.
Y es que, no somos capaces muchas veces de ser conscientes de lo afortunados que hemos sido en esta vida... por tener un grifo, por ejemplo!

Saludos cariñosos -siempre-: Angel