La Reina Ranavalona III

Ranavalona III fue la última reina de Imerina, un reino situado en lo que hoy conocemos como Madagascar. Reinó durante 14 años, desde 1883 a 1897, hasta que Francia la depuso y gobernó la isla como colonia.

Ranavalona III nació en 1861. Era sobrina de la reina Ranavalona II. Fue criada por su tía, y a pesar de ser una niña muy delgada y feúcha, enseguida se convirtió en una bella adolescente.

Razafindraheti, que así se llamaba antes de ascender al trono, amaba los animales por encima de todo. Siempre tenía algún animalillo en palacio que cuidaba con pasión.

Recibió una exquisita educación. Desde muy joven dominaba la lengua francesa, más tarde perfeccionó el inglés, y contaba con la maravillosa afición de escribir poemas.

Una vez terminada su formación, llegó la segunda parte de su aprendizaje para su formación de reina: la política, algo que ella odiaba.

En esta misma época antes de alcanzar el trono, tuvo varios amoríos, todos ellos fracasados. Una vez se enamoró perdidamente de un guardia casado que trabajaba en palacio.

Finalmente se casó con el príncipe Ratrima, del cual enviudó muy pronto sin dejar descendencia.

Alcanzó el trono en 1883 tras la muerte de su tía. Su título completo era: "Su Majestad Ranavalona III por la Gracia de Dios y la voluntad del Pueblo, Reina de Madagascar y Protectora de las Leyes de la Nación."

Más tarde se casó con el Primer Ministro Rainilaiarivony, viudo de su tía la Reina Ranavalona II. Es decir, heredó el trono y al consorte. Su marido resultó ser un maleducado y se rumorea que tuvo quehaceres con otras mujeres.

Ya desde el principio la reina tuvo que lidiar con los franceses. En 1885 firmó un tratado con este país concediéndoles diferentes derechos. En 1895, los franceses enviaron una fuerza expedicionaria que ocupó Antananarivo, capital de Madagascar.

El Primer Ministro fue enviado al exilio donde moriría un año después. Pero la reina quedó allí, a pesar que Madagascar fue declarada colonia francesa en 1896.

En 1897, la monarquía fue abolida y enviaron a la Reina Ranavalona III al exilio en la Isla Reunión.

En 1899  pasó de su exilio en Reunión a Argelia, donde moriría en 1917.

No sería hasta 1960 cuando Madagascar conseguiría de nuevo su independencia, aunque la monarquía quedó en el recuerdo de los malgaches.