Día Mundial de la Ayuda Humanitaria

Decenas de miles de cooperantes anónimos de ONG celebran el primer Día Mundial de la Ayuda Humanitaria.

La ONU ha elegido esta fecha en conmemoración del atentado del 19 de agosto de 2003 en Bagdad, en el que 22 miembros de las Naciones Unidas, entre los que se encontraba el jefe de la oficina iraquí de la organización, Sergio Vieira de Mello, murieron.
Desde entonces, la violencia contra los trabajadores humanitarios no ha dejado de aumentar. El pasado año 260 fueron víctimas de raptos y ataques que dejaron 122 muertos, una cifra superior a la de fallecidos en operaciones de paz de la ONU, según el Institito de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH).

Según el último informe del Overseas Development Institute –que cuenta desde 2006 con una base de datos sobre seguridad de los trabajadores humanitarios- la violencia se concentró en Sudán, Afganistán, Somalia, Sri Lanka, Chad, Iraq y Pakistán. En estos seis países (en orden decreciente) ocurrieron las tres cuartas partes de los ataques contra personal humanitario.
"Es el nivel el más elevado desde hace 12 años", explica la portavoz de Ocha en Ginebra, Isabel Byrs, quien considera que la degradación es particularmente sensible desde hace tres años, con una media de incidentes que aumentó un 60%.

A modo de ejemplo, sólo en lo que va de año, cuatro empleados europeos de la ONG francesa Acción contra el Hambre han sido secuestrados en Somalia y liberados nueve meses más tarde, mientras que otros tres cooperantes fueron raptados en Kenia y dos más en Darfur.

Así las cosas, el balance sobre la situación y el futuro del colectivo no es muy optimista. El el jefe de la Oficina de coordinación de los asuntos humanitarios de la ONU (Ocha), John Holmes, señala que las necesidades humanitarias "no dejan de aumentar" y destaca que, con los sistemas de ayuda existentes, "los trabajadores están cada vez más en el punto de mira".

Fuente: EL MUNDO